Descripcion
No podemos imaginar dos cuerpos más diferentes que estos. Un obeso, obeso por completo, y un enano adorable, petite ... Y sin embargo, milagro de sexo, estos dos tienen una gran cosa en común: ¡el amor se acostó! Aferrándose al enorme cuerpo de enano obeso, toma sus manos donde puede, excita esas grandes curvas lechosas e infiltra sus dedos en la mayoría de los lugares prohibidos. El bajo siente el lenguaje de esa pequeña zorra que explora su vulva, sus pezones, y luego decide cuidarla para darle la vuelta con un gran Anilingus tal como los conoce. Estas dos hermosas putas se llevan bien y los gemidos ya lo dicen. El enano se retiró abruptamente de la hendidura de su marrón hinchado, luego regresó armada con un agradable consolador azul que tiende a sonreír con un gran mal humor ... Con un juguete así además de sus lenguas, sus manos y su gran apetito, estas dos putas darán un corto viaje al orgasmo!