La vida en el taller no es todos los días retozando. Hoy la parte vieja de su siesta, como siempre, pero ahora es una mujer de las tierras del pueblo. Una madurita muy fea, y que solo viene una vez a buscar su cola. ¡Por supuesto, el abuelo no es del tipo para escupir en la sopa! Él deja a esta perra para tomar su vieja polla en su boca, su coño fluyendo comida y luego decidió dejar que sus dos empleados participen. ¡Después de todo, ellos están en la flor de la vida, ellos mismos, y satisfarán a los viejos codiciosos! Cuando llegan, encuentran el viejo tren para montar a la perra y meter su polla dentro de ella. Pero él tiene demasiados golpes más, el castillo de proa, y prefiere dejar que su oferta elimine el óxido. Con sus grandes pollas duras de veinte años, se esconden en el cuerpo de esta vieja perra y empiezan a golpear sin piedad. ¡Ella grita! Su ano es el Timeo del año, mientras quema su entrepierna. ¡Y todas estas personas que disfrutan yendo en él le vuelven loco la motivación!